Por: Edwin Matos Cabrera
Sopla, oh viento sopla!
Hasta dónde está mi jaquimeyes querido
Tócale y ven pronto a tocarme
Sentiré a través de ti su dulce tacto
Y veré su belleza a través de la luna
Porque aunque este lejos; estas siempre en mi corazón…
Oh, mi amado pueblo!
Sal de la tiniebla y demuéstrale al mundo que si existe
Que con tu aroma y tus encantos embrújate a miles de persona
Que estuvieron de paso
Lo enloqueciste, lo volviste adicto a ti…
Sal y demuéstrale al mundo que a pesar de todo sigue en pie de batalla
Para ganar la guerra; una guerra que nos concierne a todos…
Oh, adorado pueblo!
Habitado por gente dulce, amable, cariñosa, bondadosa; en fin,
Cualidades que solo la encuentra donde están las gentes con deseo de vivir
Ganas de triunfar…
Oh, pueblo!
Abatido por fenómenos naturales y también humano
Pero sigue aun ahí de pie.
Levantémonos y demostraremos que si unimos
Nuestra fuerza, seremos invencible y que solo Dios podrá destruirla
Adelante mi pueblo; Ni un paso atrás…
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martes, 24 de noviembre de 2009
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Unidos por los elementos:
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