JAQUIMEYES, Barahona.- Pasadas las lluvias de los últimos cinco días, este municipio tiende a normalizarse, pero el alcalde, Domingo Florián, entiende que se precisa de la intervención del Gobierno para evitar que la economía local colapse.
Esto así debido a que esta comunidad inminentemente agrícola, cuyas familias dependen, básicamente, del cultivo de plátano, yuca, cocos y otros frutales mayores y menores, además de la pequeña y mediana ganadería, pero la agropecuaria sufrió graves embates al paso de la tormenta tropical Isaac y sus efectos devastadores.
Desde que este poblado comenzó a inundarse por las lluvias caídas y el aumento del caudal del río Yaque del Sur, el ingeniero Florián advirtió que la economía podría colapsar en los próximos días, si las autoridades del gobierno central, no acuden a la misma luego que quedará bajo las aguas.
La agropecuaria quedó destruida por el paso de la tormenta Isaac en la región suroeste, por lo que, aunque el presidente Danilo Medina viajó al Suroeste y dispuso algunas medidas, el alcalde del municipio cree que es urgente que la intervención del Estado se sienta, para evitar la quiebra total de los agricultores, los ganaderos y otros segmentos de la economía de esta localidad.
El ingeniero Florián recordó que los vientos huracanados de Isaac causaron estragos a la agropecuaria en sentido general, además de la destrucción de decenas de casas, caída de postes del tendido eléctrico, pero no se reportaron víctimas ni heridos.
Dijo que los cultivos de plátanos, guineos y maíz, fueron destruidos debido a los fuertes vientos, que afectó además unas 300 viviendas, de las cuales a 50 las brisas le volaron el techo. Además la producción apícola, sufrió bastante y que aun se cuantifican los daños provocados.
El alcalde Florián dispuso que con los equipos con que cuenta la comunidad sean colocados muros de contención en las riveras del río Yaque del Sur y en zonas peligrosas para evitar que las aguas causen mayores daños que los producidos hasta el momento. dijo que los puentes de la comunidad no sufrieron daños.
El problema de mayor peligro fue la caída de cuatro postes del tendido eléctrico de la comunidad, situación que tratan de corregir los técnicos de Edesur y la CDEEE.
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